Ella dice que el tiempo no tiene tiempo…
Que las vidas de los otros aun parecen incomiables.
Afables…y hasta pudiera decirse que perfectas…
Porque son de esas concisas, pequenas y confiables…
Y yo digo que el mejor de los placeres es el hambre…
La de amar y ser amado, la del simple que ha pecado.
Esa hambre de saber cual es mi estrella, y no buscarla…
Las del hecho de entender sin entender…y ser humana.
Pero en esa percepcion se que la pierdo…
Que le cansa mi cansancio, y la pone un tanto inquieta…
Pero yo soy la que soy…y aun la amo…
Aunque sepa que el dolor no me completa…
Y yo dejo que ella diga lo que siente…
Y la observo y le concibo entre mis suenos…
Y permito que se vaya con sus miedos…
Y que vuelva cuando el tiempo…no sea tiempo….
Baldra Torres
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