Tomaré al tiempo del cabello, me daré un permiso
volveré a vivir mi vida con otras decisiones
de mi adolescencia mirar sus albores
no jugaré con carritos ni mataré lagartijas
ni leeré Edipo rey, fascinada y curiosa
ante la tragedia de una vida que estaba escrita
mucho antes de que naciera la discordia
Me hubiese vestido de coqueteria y hubiese estado bien
era bella, muy bella en esos años de avena en hojuelas
hubiese tenido sexo sin protección, amores formales
Me hubiese enamorado de ti cuando me miraste
te hubiese dicho que si y escapado contigo
me habrias hecho llorar, me habrias hecho reir
y te hubiese entregado mis entrañas virginales
Te habria parido hijos con tus ojos y mi sonrisa
navegado contigo mares en noches desatadas
como aquella que vivimos en esa playa desierta
Asi son los poemas, dejan ver más allá del alba
y comprobar que al final, todo es lo mismo
no me di el permiso de envejecer contigo
me negué a equivocarme entregandote el alma
Hubiese terminado igual, sola, abandonada
con hijos que me verian de vez en cuando
sin ti, que siempre estas acompañado
renovando el amor que con los años medra
Retornando al ahora, así me prefiero
eres recuerdo inolvidable, te quise a mi modo
pensandolo bien, que desastre hubiera sido
jamás he podido hacer un huevo frito
ni planchar una camisa o lavarte las penas
jamás nos hubiesemos dicho un te quiero
y no hubiese podido escribirte un poema
@EMILIA MARCANO QUIJADA 2011, Venezuela.
volveré a vivir mi vida con otras decisiones
de mi adolescencia mirar sus albores
no jugaré con carritos ni mataré lagartijas
ni leeré Edipo rey, fascinada y curiosa
ante la tragedia de una vida que estaba escrita
mucho antes de que naciera la discordia
Me hubiese vestido de coqueteria y hubiese estado bien
era bella, muy bella en esos años de avena en hojuelas
hubiese tenido sexo sin protección, amores formales
Me hubiese enamorado de ti cuando me miraste
te hubiese dicho que si y escapado contigo
me habrias hecho llorar, me habrias hecho reir
y te hubiese entregado mis entrañas virginales
Te habria parido hijos con tus ojos y mi sonrisa
navegado contigo mares en noches desatadas
como aquella que vivimos en esa playa desierta
Asi son los poemas, dejan ver más allá del alba
y comprobar que al final, todo es lo mismo
no me di el permiso de envejecer contigo
me negué a equivocarme entregandote el alma
Hubiese terminado igual, sola, abandonada
con hijos que me verian de vez en cuando
sin ti, que siempre estas acompañado
renovando el amor que con los años medra
Retornando al ahora, así me prefiero
eres recuerdo inolvidable, te quise a mi modo
pensandolo bien, que desastre hubiera sido
jamás he podido hacer un huevo frito
ni planchar una camisa o lavarte las penas
jamás nos hubiesemos dicho un te quiero
y no hubiese podido escribirte un poema
@EMILIA MARCANO QUIJADA 2011, Venezuela.
Comentarios
Publicar un comentario